La información es hoy el campo de batalla.

Entrevista al periodista Iroel Sánchez

Por: Volker Hermsdorf

para el "Junge Welt"

El intelectual y periodista Iroel Sánchez fue presidente del Instituto Cubano del Libro, es actualmente coordinador de la Enciclopedia cubana EcuRed y el autor del blog muy conocido »La pupila insomne«.

La UE quiere negociar con Cuba sobre una normalización de las relaciones y en EE.UU. políticos como el Exgobernador de Florida, Charles Crist, así como los senadores Patrick Leahy y Jeff Flake demandaron el cese del bloqueo contra Cuba. ¿Son estas señales para un fin de la guerra fría y los ataques contra Cuba?

Es todavía demasiado temprano para decir algo en detalle. Sin embargo, me parece que esto es el resultado de la permanencia del socialismo en Cuba y un éxito de la Revolución que ha mantenido su línea sin hacer concesiones a quienes le intentaron imponer una agenda. Ahora algunos políticos en Europa y EE.UU. notan que sus intentos destruir la Revolución han fracasado. En la cumbre de la CELAC en enero se ha hecho evidente que en nuestro continente no es Cuba la que está aislada, sino aquellos que nos combaten. La exclusión, el bloqueo y la injerencia abierta no les han traído nada. Ahora ellos buscan otros caminos. Las nuevas señales son una prueba de la fuerza de la Revolución cubana y su autoridad alta en el mundo. Si la Revolución fuera débil, ellos no cambiarían su comportamiento. Pero esto no significará un fin de los ataques, no lo creo.

¿Se puede negociar en serio con Cuba y continuar al mismo tiempo la confrontación?

Ellos no quieren negociar con Cuba porque renunciaron a sus objetivos, sino porque han fracasado por completo con su política. Lo que vemos hoy en Latinoamérica es posible en buena medida por la permanencia de la Revolución cubana. Ellos comprenden, que la confrontación abierta contra Cuba les aporta más daños que exito. Pero claramente los gobiernos de EE.UU. y una parte de los de Europa van a continuar con su politica para desacreditar, debilitar y destruir la Revolucion. En mi opinión, la injerencia, la subversión y la guerra mediatica continuarán desde algunos gobiernos europeos y sobre todo desde Estados Unidos.

¿Cómo usted juzga los ataques furiosos de contras en Miami? ¿Ellos han perdido ya?

Ellos perdieron desde el día que se aliaron al gobierno estadounidense en 1959 pero no se rendirán, la conspiración contra Cuba es un negocio y se trata de muchísimo dinero. Diferentes agencias de EE.UU. distribuyen año tras año millones de dolares a docenas de grupos para combatir la Revolución.

Los enemigos del sistema politico en Cuba han estado, con respecto a las informaciones que circulan, sorprendentemente tranquilos. ¿No temen quedarse en el paro próximamente?

Seguramente no. El Congreso de EE.UU. ha concedido por este año 17,5 millones de dólares mas para la subversión contra Cuba y hay dinero también para el 2015. El problema es que ellos no tienen ninguna posición independiente, sino que existen al servicio de quien les paga, fundaciones europeas y la Oficina de intereses de EE.UU en La Habana y son guiados por estos. Si se discute allá sobre una nueva línea, ellos tienen que esperar nuevas directrices. Recuerda que son un espejo de instituciones foráneas que los respaldan y que –como les orientó el agente de la CIA Montaner- deben abarcar desde liberales hasta socialdemócratas para buscar legitimarse internacionalmente, su objetivo es dañar la imagen del país en el exterior. Los propios norteamericanos tienen claro y lo han dicho en los cables revelados por Wikileaks que no tienen ningún peso real en la sociedad cubana.

Usted ha viajado a fin del último año por invitación de organizaciones de solidaridad por España para intercambiar sobre Cuba. ¿Qué impresiones tuvo usted?

Por una parte los grandes medios divulgan allá mucha información distorsionada sobre Cuba. Por otra, hay interéres en saber qué pasa en Cuba realmente y cómo nosotros resistimos la ideología neoliberal. Seguramente esto está unido a la crisis del capitalismo que afecta brutalmente a España. Ahora muchos españoles conocen la cara fea del capitalismo y buscan alternativas. Y al mismo tiempo muchos cubanos que han emigrado hacia allí toman consciencia de qué ventajas les permite la sociedad socialista en Cuba.

¿Cómo los movimientos de solidaridad europeos pueden mejorar su apoyo al proceso revolucionario en Cuba?

Ante todo, es importante comprender que la solidaridad es política, no un hecho caritativo, conlleva la comprensión de que podemos batir al adversario común, la ideología neoliberal. En los años 90 muchas personas estaban enfrascadas en ayuda material para Cuba y eso jugó un papel. Hoy la lucha contra las mentiras y las manipulaciones de los grandes medios es, a mi juicio, lo más importante. Aunque los adversarios se sientan obligados a negociar ahora con Cuba, la guerra mediatica será continuada como hasta ahora. Hoy la información es el campo de batalla en el cual la Revolución tiene que ser defendida.